Una doble página dedicaba el domingo el diario El Mundo a analizar la situación política española desde el punto de vista de la astrología. Sí, ha leído bien, de la astrología. En 2016, un periódico español consulta las estrellas para ver cuándo tendremos un nuevo Ejecutivo. «No habra Gobierno ¡¡por Saturno!!», se titula el disparate, firmado por el astrólogo Vicente Cassanya. «El triángulo que configuran Neptuno, Saturno y la Tierra marca un tiempo de alta inestabilidad política», afirma el augur, quien añade que «habrá crisis hasta final del 2017», cuando Rajoy pasará a la Historia. «Podríamos decir que Mariano Rajoy encarna a Saturno, Pedro Sánchez a Neptuno y Albert Rivera a la Tierra… Todo ellos y el líder de Podemos nacieron marcados por el ciclo Saturno-Neptuno, algo excepcional«, escribe Cassanya. Para él, «estamos en el ciclo maldito de los planetas».
No merece la pena pararse a analizar nada. Son dos páginas de sinsentido astrológico, como lo serían si estuvieran dedicadas a la firma de los líderes políticos o la forma de sus caras. Cito la grafología y la morfopsicología porque son las dos artes adivinatorias, junto con la astrología, con las que más frecuentemente hacen el ridículo los grandes medios en periodos electorales. Supongo que el diario madrileño no ha consultado las entrañas de aves por miedo a la reacción de los animalistas.
Hubo un tiempo en el que El Mundo se llamó El Mundo del siglo XXI. Está claro que le sobraba una equis.
Información publicada en Magonia el 22 de agosto de 2016.