
Antes de que Danson interpretara al espiritista en la miniserie Living with the dead (Viviendo con los muertos, 2002), él y su mujer, la también actriz Mary Steenburgen, vivieron con Van Praagh dos o tres «experiencias notables». «Entras por la puerta como escéptico y luego se te desencaja la mandíbula», explicaba el intérprete en Larry King Live el 25 de abril de 2002. «Tenía una sensación de pérdida y nostalgia de mi padre, que había fallecido unos seis meses de antes. Y, después de aquella tarde con James, siento como si ahora tuviera una relación con mi padre. No es que pueda hacer lo que James hace, pero me es suficiente. Siento que en la actualidad tengo una relación con mi padre». Meses antes, el actor había dicho en los medios: «Estoy seguro de que no pasará mucho tiempo antes de que todos hablemos con personas que han fallecido. Es una tendencia creciente». Ahí están Telecinco y su Más Allá de la Vida para demostrarlo. ¿O no?
La entrevista de la CNN empezó con una puntualización de Danson a cómo había sido presentado por King en el sumario. «Lo primero, quiero decir algo sobre tu afirmación inicial de que yo he contactado con mi padre, con mi padre muerto. Es una completa tontería. Él ha contactado conmigo». ¡Como si hubiera alguna diferencia para el resultado final: que es un crédulo de tomo y lomo! A partir de ahí, la conversación discurrió por los derroteros previsibles de loa al médium, también en el plató y que en la última parte del programa simuló que contactaba con los muertos de los espectadores que llamaban por teléfono. Danson cree que los muertos se quedan en espíritu a nuestro alrededor. «Casi todas las culturas tribales del mundo se relacionan con su antepasados», explicaba a Larry King hace nueve años. Y se mostraba convencido de que «el don de James es muy raro. Pero el fenómeno [se refiere a la mediumnidad] creo que es de sentido común». Alguien tendrái que explicarle los trucos que usan los médiums como Van Praagh en programas como Más Allá de la Vida y en el mundo real.