Que Los protocolos de los sabios de Sión, el supuesto plan judío para conquistar el mundo, son un fraude quedó claro ya en 1921 cuando el periodista Philip Graves demostró en The Times que eran un plagio del Diálogo en el infierno entre Maquiavelo y Montesquieu (1864), del escritor satírico francés Maurice Joly. Sin embargo, todavía hoy se encuentran en Internet sitios donde el panfleto, publicado originalmente en Rusia en 1903, se presenta como auténtico. Es lo que pasa con las conspiraciones inventadas -en este caso, por el servicio secreto zarista-, que, no importa cuántas veces se demuestre su falsedad, siempre hay alguien dispuesto a otorgarles verosimilitud.
Herederos intelectuales del autor de Los protocolos son hoy en día quienes sostienen que el 11-S fue un autoataque estadounidense, que existe un gobierno oculto que maneja los hilos del mundo, que el terrrorismo etarra estuvo detrás del 11-M… Nadie está libre de caer en un engaño de este tipo por antipatía hacia un grupo determinado o por otras causas. Henry Ford, el magnate automovilístico, publicó desde 1920 en Estados Unidos varias ediciones de Los protocolos y, ese mismo año, Winston Churchill, entonces secretario de Estado de la Guerra británico, alertó en el London Illustrated Sunday Herald de la existencia de una «conspiración (judía) a escala mundial para el derrocamiento de la civilización y por la reconstitución de la sociedad sobre la base de un desarrollo limitado, una malevolencia envidiosa y una igualdad imposible». El fomento del odio racial alcanzó su clímax con Adolf Hitler, quien incorporó Los protocolos a sus discursos y se sirvió de ellos para justificar el exterminio de los judíos.
«Abrigo la esperanza de que este trabajo pueda ser un clavo más que hundir en el ataúd de ese aterrador fraude vampírico», escribió Will Eisner (1917-2005) en el prólogo de La conspiración. La historia secreta de ‘Los protocolos de los sabios de Sión’, su última obra. La novela gráfica, que acabó poco antes de morir, recrea cómo nació el fraude, sus efectos y su resistencia a desaparecer. Prologada por Umberco Eco, es una delicia en fondo y forma, una magnífica obra que ilustra lo difícil que es la lucha contra la mentira y que podría, sin duda, dar mucho juego si se recurriera a ella con fines educativos, si fuera material de lectura para nuestros bachilleres.
Will Eisner [2005]: La conspiración. La historia secreta de ‘Los protocolos de los sabios de Sión’ [The plot. The secret story of ‘The protocols of the elders of Zion’]. Norma Editorial (Col. «Will Eisner», Nº 15). Barcelona. 150 páginas.
Reseña publicada en Magonia el 27 de abril de 2009.