
Un ama de casa descubrió un rostro en una mancha de grasa en el suelo de su cocina y se asustó. Así nació el 23 de agosto de 1971 el enigma de las caras de Bélmez. Para algunos, el mayor misterio de la parapsicología española. Los rostros que a partir de ese momento aparecieron en aquella cocina atrajeron hasta el pueblo jienense a una multitud de periodistas que, con la inestimable ayuda de parapsicólogos y videntes, convirtieron Bélmez de la Moraleda en una suerte de Roswell cañí. Después de unos meses, las sospechas de fraude obligaron al misterio a refugiarse en las revistas esotéricas, junto a platillos volantes y fantasmas, y luego cayó en el olvido. Hasta que en 1997 resucitó…
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Ya me ha pasado varia veces, cada vez que quiero leer un artículo de ustedes me pide que pague. Si queremos desenmascarar la pusedociencia tal vez no sea el mejor camino.