
La foto tomada por la periodista Luisa Idoate lo dice todo: el maestro dio una lección a una alumnado de todas las edades deseoso de aprender. Allí estuvimos los organizadores del ciclo disfrutando de la conferencia y, después, de una magnífica cena de amigos que abrió el profesor Ayala con un brindis con champán. Fue la fiesta del 200 cumpleaños de Darwin una celebración del ingenio humano que algunos tuvimos oportunidad de compartir con un gran científico que, además, es un divertidísimo conversador y una bellísima persona, como he comprobado repetidamente en los últimos diez años. Todavía quedan dos interesantísimas conferencias en este febrero de Darwin bilbaíno, la de Pilar Carbonero sobre la evolución de las plantas guiada por el ser humano y la de José Manuel Sánchez Ron, acerca del naturalista inglés y su tiempo. Después, en la trastienda empezaremos a trabajar en otros actos, incluidos, ¡cómo no!, los del Día de Darwin de 2010.
Gracias, Francisco, en mi nombre y en el de todos los que participan en este proyecto de divulgación del pensamiento crítico y el conocimiento que comenzó en noviembre de 2006 con la organización de la jornada Misterios, a la luz de la ciencia -que fue el embrión de un interesante libro– y que, impulsado inicialmente desde el el Círculo Escéptico y el Centro para la Investigación, no hubiera sido posible sin la Universidad del País Vasco, la Unidad de Biofísica de la UPV y el CSIC, el CIC bioGUNE, el diario El Correo y el Ayuntamiento de Bilbao.